Tuesday, November 29, 2011

(Los abrazos rotos) Desenredando pasiones

Colores, pasión, carne, desesperación, más un toque bizarro y grotesco completan la receta Almodóvar. Una de las cosas que más me gustan del cine, obviamente influenciada por mi carrera, es descubrir a los directores en sus películas. Conocerlos, analizarlos, reírme con ellos en sus escenas, colores, sonidos, tipografías. Y nada más lindo que encontrar ese lugar común que uno espera de un particular un director. Y ver que una vez más, no decepciona.
Los abrazos rotos, film protagonizado por Penélope Cruz y Lluis Homar. La primera, la bellísima nueva adquisición de Almodóvar, uno de sus más recientes fetiches. Porque, qué sería de los clásicos directores sin sus musas. Y así como Scarlet completó a Woody, Penélope le va como anillo al dedo a Pedro. Hermosa, despampanante, con ese toque iluso, como una chica Almodóvar debe ser.
Tengo la sensación que a aquellos que les gusto Volver, encontraran lugares comunes con este film. Serán los actores, serán los colores. Será la bizarres, la exageración, los diálogos desopilantes. Sera Blanca Portillo. 
O serán las historias que nos gusta escuchar. Historias sobre amores enredados, desencontrados. Amores que uno nunca sabrá si pudieron haber sido. O si debían terminar tal como lo hicieron. Un film sobre fidelidades y no tanto, sobre la naturaleza humana en cuestiones del corazon. Tan indómita, tan obsesiva, tan adicta, tan apasionada, tan poco racional. Tan subjetiva. Tan poco generalizable. Tan in-analizable. 
Un excelente film que además hace su propio homenaje a la producción fílmica misma, a sus avatares y a la propia pasión que la propulsa. Una película realista, digo, en cuanto a sus desenlaces. Sin rosas ni colchones. El amor, en su mas cruda realidad: instantes, efímeros, que nos enriquecen y hacen felices por lapsos breves de tiempo. Y luego por motivos más o menos comunes, nos dejan de nuevo frente a nosotros mismos, tomando una vez mas las riendas de nuestro propio camino. Como dijo James Lipton (Director del Actors Studio y conductor del "Inside the actor's studio", programa que recomiendo fervientemente que vean) "Hollywood movies like happy endings, but of course life doesn't fade out after the final frame. At its best Life has happy beginnings, with all the hope and peril that that implies."



Thursday, November 24, 2011

(The Beaver - La doble vida de Walter) Pero el amor es más fuerte

Increíble que a pesar de mi prejuicio hacia Foster, haya mirado esta película. Me alegra haberlo hecho. Foster ha sido siempre una pésima actriz, pero como directora realmente me ha sorprendido. Sorpresivo.
Este film no solo tiene muy buen ritmo, buena fotografía y una banda sonora muy bien elegida, sino que además nos brinda la posibilidad de ver uno de los casos más raros de la psicología: la externalización. Desde la psicología sistémica se utiliza como un recurso para exteriorizar, valga la redundancia, aquellos aspectos negativos de la personalidad del paciente y así, poco a poco, ir haciéndolos cada vez más ajenos, hasta que la persona aprende a vivir sin ellos. Este caso es un tanto distinto, bastante distinto, ya que claramente el personaje desarrolla algún tipo de disociación severa. Muy, muy interesante para analizarlo como caso.
Lo especial de esta la película, es el desarrollo de los personajes que logra, para comprobar una vez mas que somos en el vínculo, no en la soledad. Una película con un humor negro muy bien llevado y, a mi parecer, una excelente actuación de Mel Gibson. Foster pobrecita nunca aprendió a actuar, pero al menos supo dirigir.
Un film con un hermoso mensaje para esta sociedad cada vez más aislada e individualista, para pensar sobre los vínculos, sobre nuestros pilares. Sobre la insoportable soledad. Sobre aquel perdido instinto gregario y su invaluable valor. Somos quienes somos gracias a quienes nos rodean, a su apoyo, a su incondicionalidad, a  el reflejo que nos devuelven en las relaciones que compartimos.
Una película para pensar que nada es tan terrible, ni tan irreparable, siempre que tengamos ese hombro donde apoyarnos. Una palabra en el momento indicado, esa sonrisa que alivia la herida mas profunda, el hombro que aguanta todas nuestras lagrimas, la palmada que nos indica que lo hemos logrado. Que seriamos sin nuestros pilares, nuestros amigos, nuestra familia. La depresión es abrumadora porque te deja solo, encerrado en tu casa, en tu cama. Y lo único que nos saca de ese abismo, ademas del primer impulso propio, es el amor del resto. Como dice la película: "Alguien que desea ayudarlos, apoyarlos.....besarlos, perdonarlos......soportarlos, esperarlos, cargarlos.....amarlos. A pesar de que no siempre todo esté bien....hay una cosa que sé que es verdad. No tenemos que estar solos."



Sunday, November 6, 2011

(Changelling - El sustituto) Mujeres mirando al sudeste

Clint Eastwood suele no defraudar con sus Thrillers. Esta, no es la excepción. Película dura, dramática  pero bien guionada y desarrollada como aquel drama escalofriante que fué "Río Místico". El sustituto es uno de esos films que no le aconsejaría ver a ninguna madre. Una película, cruda, muy realista, oscura en varios ángulos.
Esta vez, voy a empezar diferente, contando el argumento. Este film relata la historia (real aparentemente) de una mujer cuyo hijo desaparece. La policía alega haberlo encontrado, pero cuando se lo enseñan a su madre, ella ve claramente que él no es su hijo. La película desarrolla entonces la batalla de esta mujer de los años 20 contra la policía, los medios, los prejuicios, en búsqueda de su verdadero hijo.
En esto me quiero detener: cuantas veces, innumerables, hemos creído un juicio porque la policía así lo dictaminó y los medios así lo avalaron. En el caso de esta pobre mujer, sumemos le una internación psiquiátrica, por su supuesta demencia en creer que ese no es su hijo. Las imágenes del hospital mental son escalofriantes..mas aun cuando uno sabe que no son ficticias.
Da la casualidad, que hará unos 70 años atrás, mi bisabuelo se auto-internó en el psiquiátrico de Open Door. Para ser más exactos, se internó en otro lugar y fue trasladado allí después. Años más tarde, lo enterraban como NN en el cementerio de Luján. Y uno, no deja de preguntarse por lo que pasaban, sin juicio mediador alguno, sin posibilidad alguna de reclamo, estas personas que por decisión propia, por dictamen autoritario de las fuerzas policiales o por problemas mentales, terminaban en dichos infiernos. Me impresionó mucho como está caracterizado el psiquiátrico en esta película, me recordó las fotos que he visto en clase del Borda o el Moyano y las prácticas que en ellos se realiza(ba)n.
Terrible es pensar a veces como la ciencia, la medicina, sumada a la búsqueda del orden público, pueden conjugarse en atrocidades que ni la SS podría haber diseñado mejor. Bajo la supuesta etiqueta de la "re-adaptación social" o su supuesta "peligrosidad" se han dejado catatónicos a centenares de seres humanos. ES sabido, nada más alienante que un hospital psiquiátrico  Eso fue lo que me atrapó de esta película (aunque es tan natural, que suele pasar con todas las que nos encierran por un momento allí dentro): tan solo ver 20 minutos de escenas dentro de estos psquiátricos empezamos a sentir la desesperación, la desazón, la abulia de estar sin remedio allí adentro. No hay salida. no hay comportamiento que no pueda ser malinterpretado, catalogado, etiquetado. Si al final, pobres psiquiatras,no hay peor ciego que el que no quiere ver. Si les interesa, hay un experimento muy interesante que hicieron una vez encerrando psiquiatras, sin que los del hospital lo supieran. Escalofriante.
Volviendo a la película, Angelina me sorprendió por segunda vez. La primera casualmente pasaba por un psiquiátrico también (La inocencia perdida, excelente). Su actuación es aplaudible, nos interna realmente en la piel de esa madre. Acompañada por Malkovich, esta película no tiene desperdicio. Un film muy drámatico, si, pero que podíamos esperar de Clint, siempre poniéndonos nuestras crudas pero reales verdades arriba de la mesa.