Sunday, June 17, 2012

(The artist - Hugo) Que se puede hacer salvo ver peliculas

Ambas películas las vi hace unos cuantos meses. La humildad no me permitió escribir nada sobre ellas hasta hoy. No es que me sienta más sabia o crea tener la altura suficiente (ja) simplemente hoy estoy inspirada. Lamentablemente la rutina diaria, los viajes, las locuras de los transeuntes, los divagues propios, el cansancio, no nos (me) dejan ni si quiera disfrutar ver una buena película. Nos conformamos con con instantes, con series, con fragmentos de esa gran magia que es el cine. Y que solo el cine nos puede dar. Nada, repito, nada, puede compararse con el ese placer ad infinitum de comprar la entrada, hacer la fila, sentarse, reirse de los trailers, quedar impactado frente a los más efectivos, y entonces, anunciando que la magia comienza, el silencio...y los títulos. Nada en este mundo me produce más placer que ese instante: la incertidumbre, la duda, la entrega total a lo que el director tiene para ofrecernos.
Estas dos películas hablan justamente de eso: esta pasión que es el séptimo arte. Irónicamente los franceses le hacen un homenaje al cine mudo norteamericano (The artist) y los yanquis un homenaje al cine fránces ( Hugo ). Ambas miradas, entrecruzadas, nos regalan lo mejor de cada mundo. La verdad me cuesta describirlas...y lo que diré sonará sonso...Pero creanme no hayo otra forma: son peliculas sobre todo lindas...en las que uno se mete y se deja fluir por el vaiven de escenas, por las idas y venidas de los personajes, asi en una orquesta de colores (monocromaticos o no) ambos films nos transportan a ese mundo que supera al de los sueños...o donde nacen los sueños, como dijo Melie. Porque allí, y solo allí, podemos cumplir cualquier fantasía...y soñar con la propia, creando nuestra próxima utopía.
Estas dos películas tienen en comun algo maravilloso: el homenaje al cine. Arte que a mi gusto nos permite ver otras visiones sobre nuestras propias posibilidades...la vida no es más que ficción, la que uno mismo se arma en su propia cabeza...Infelicidad si desea hacerse problemas donde no los hay, felicidad absoluta si se abstiene de las miserias que nos rodean...pero al final no es más que eso...películas...guiones con infinitas posibilidades ...Cada cual vive la ficción que más le gusta...
La vida siempre tendrá complicaciones, más o menos amenas, al final, ¿Quién tiene la vara que mide? Cada uno cree que sus problemas son únicos, incomparables, que solo uno mismo puede entenderse, "vos no entendes, a vos no te pasó" y si...porque solo uno puede ver los cuadros pasando uno atrás de otro...en esa secuencia que cada uno puntúa, que cada uno significa.
Estas películas tienen esa maravilla, nos muestran desde adentro, desde lo mas profundo, poniéndole brillo a aquello que debe ser mirado, a aquello único que es el cine...Ambas, cada uno desde su ángulo, nos dan un tour maravilloso por este mundo mágico, que es el cine.
El artista desde su lado mas antiguo, el cine mudo...Un pobre mortal nacido en el siglo XX piensa, que embole,  ¿no hablan en toda la película? ¿Cómo se soporta?...Bullshit..Cuantas verdades pueden ser dichas en el lenguaje no verbal, en un simple movimiento...Cuanta intensidad tiene un plano, una mirada, un simple redoblante...Una película mágica, que nos permite viajar en el tiempo, incluso a aquel que jamas vio una película muda, lo hacen enamorarse de este género.
Y Hugo, mágica  por donde se la mire. Con un maravilloso 3D que nos hace adentrarnos en esa ciudad alucinante que es París, en una época gloriosa e hipnotisante... Contándonos nada menos que la historia de uno de los pioneros más geniales de la historia del cine, Meliès, quien ideara los primeros efectos especiales de la historia del cine... Una historia que de niños no tiene absolutamente nada, yo la llamaría una película para soñadores...en cuyo final al menos yo llore de emoción, redescubriendo lo hermoso que es estar sentado en una butaca en el cine...creyendo que el tren se nos viene realmente encima. Una obra maestra de un genial Scorsese.
No le recomendaría esta película a cualquiera: solo a aquel que aun tiene una mente que sabe volar, que sabe apreciar, solo a aquel que todavía cree en otros mundos posibles, aunque más no sean imaginarios... A aquel que aun pueda ser un niño por dentro, sin sentirse estúpido o creer que pierda el tiempo..A aquel que aun sabe soltar sus pies del asiento, dejarse llevar, meterse en la pantalla....y disfrutar...Disfrutar de lo maravilloso que es el cine. "El cine, el lugar donde se fabrican los sueños."






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